Desde el Partido Comunista de Madrid queremos hacernos eco de la movilización de las trabajadoras y trabajadores del sector de Espectáculos y Eventos, que bajo el lema #AlertaRoja #HacemosEventos, dieron este 17 de septiembre en varias ciudades de todo el país una muestra ejemplar de manifestación en las calles organizada y segura frente al contagio en este tiempo de pandemia que estamos sufriendo. Llevamos siguiendo esta movilización desde sus inicios y, si bien no compartimos la totalidad del manifiesto, ya que la experiencia de la historia reciente demuestra que ganamos conflictos y mejoramos nuestras condiciones de vida cuando la clase obrera luchamos por nosotras y para nosotras, y no para defender privilegios fiscales para los empresarios, sí apoyamos la lucha que las trabajadoras y trabajadores del sector están dando en la calle para visibilizar las precarias condiciones económicas que están sufriendo por la suspensión de su actividad a causa del COVID-19 y para exigir a las administraciones públicas el apoyo necesario para garantizar su propia supervivencia económica y de sus familias y la mejora de sus condiciones de trabajo.

En este sentido, venimos denunciando desde hace tiempo que la situación de partida antes del COVID-19 de estas personas ya era dura y precaria por el abuso de la temporalidad, la intermitencia, el pluriempleo, los falsos autónomos y la imposición de la contratación por cuenta ajena, las prácticas fraudulentas de los empresarios del sector y los trabajos en B, las largas jornadas de trabajo y los fraudes en su cómputo, remuneración y cotización, lo escaso e incompleto de la legislación específica en materia de protección frente a riesgos laborales, la siniestralidad en giras y festivales, la violación de los escasos convenios colectivos, acuerdos sectoriales o legislación laboral básica, la exigencia opresiva de una polivalencia cada vez más impuesta en desmedro de las especialidades de cada profesión y los conocimientos y experiencia necesarios para ejercerlas sin riesgo para la salud y la integridad física, la destrucción del empleo estable en favor de externalizaciones a Multiservicios y ETTs, y la sobrecarga del trabajo exigido por la misma remuneración.

Y con todo ello, la crisis económica provocada por la sanitaria y la reescalada de contagios no dejan prever un futuro próximo muy positivo para estas trabajadoras y trabajadores y sus familias, a menos que se acometan medidas específicas de protección económica y al empleo desde las administraciones públicas competentes y se reestructuren las condiciones de trabajo del sector a favor de estas personas. Por esto, en primer lugar, queremos animar y mostrar nuestro apoyo a las trabajadoras y trabajadores a que sigan la lucha en la dirección de exigir la mejora de sus condiciones de trabajo y de su sustento: frente al COVID y los bolos cancelados, pero también frente a la situación laboral de la que ya vienen desde antes del COVID. Que no se trate de defender la supervivencia del sector como la misma estructura previa asimétrica de malas condiciones de trabajo, poca estabilidad laboral, mala remuneración, falta de personal, falta de medios de prevención de riesgos laborales, alto índice de accidentes y siniestros cada temporada de giras y festivales, alto índice de enfermedades profesionales y abuso de prácticas ilícitas de explotación laboral a las personas más jóvenes por parte de las patronales; sino para reestructurar el sector en una forma más justa para las y los trabajadores. También les animamos a que aumenten sus fuerzas organizándose en los sindicatos de clase, y a que mediante elecciones sindicales elijan de entre sus compañeras y compañeros a sus Representantes Legales de los Trabajadores, para así obtener el refuerzo legal que otorga la Ley Orgánica de Libertad Sindical y el apoyo sindical y jurídico de su sindicato en la ordenación del trabajo diario y la negociación de los Convenios Colectivos.

Y en segundo lugar, solicitamos al Ministerio de Cultura y Deporte, la Consejería de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid y el Área de Gobierno de Cultura, Turismo y Deporte de Madrid, que se adopten y apliquen las siguientes medidas:

PROPUESTAS DESDE EL PARTIDO COMUNISTA DE MADRID

• Constitución de una Comisión Estatal para la negociación de un Convenio Colectivo Estatal de Giras de Espectáculos y Eventos, amparada por el Ministerio de Cultura, con participación de todos los agentes sociales.
• Legislación específica en materia de mejora de las condiciones de trabajo del sector, vinculada a cuantas ayudas, exenciones, préstamos y moratorias le sean reconocidas a las empresas del sector, y cuyo cumplimiento sea requisito obligatorio para acceder y permanecer en el disfrute a aquellas.
• Con las dos propuestas anteriores debe quedar garantizado un aumento de las contrataciones en el escenario post-COVID, un reparto más equilibrado de la carga de trabajo, y el establecimiento de un régimen de descansos y libranzas mediante relevos de turnos y jornadas de trabajo.
• Seguimiento y aplicación estricta por parte de las empresas organizadoras de los eventos de Planes de Prevención de Riesgos Laborales, elaborados por profesionales especialistas en Evaluación de Riesgos, garantizados por un refuerzo desde las administraciones públicas en personal y recursos a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y la constitución de Comités de Seguridad y Salud electos entre los trabajadores. Con esto se busca reducir el índice de accidentes y siniestros laborales sufridos por las trabajadoras y trabajadores del sector, y evitar los contagios por COVID-19, sea cual fuere su régimen de contratación, en giras, eventos y festivales.
• Mayor participación de las trabajadoras y trabajadores en la toma de decisiones estratégicas para garantizar la viabilidad del sector, sea en las negociaciones con las administraciones públicas o en los acuerdos de mesas sectoriales. Es imprescindible que las personas trabajadoras del sector, por cuenta propia o ajena, tengan voz y voto determinantes en la toma de decisiones en el sector, en las administraciones públicas, y en las productoras de eventos y espectáculos, para que las medidas adoptadas sean justas, equitativas y proporcionadas para sus necesidades y condiciones de prestación del trabajo.
• Las empresas del sector deben garantizar el abastecimiento, suministro y aplicación de todas las medidas de prevención sanitaria colectiva e individual frente al COVID-19 a las personas trabajadoras, artistas y público, de acuerdo a las evaluaciones y planes de prevención realizados por profesionales especializados para cada espacio y los protocolos sectoriales, planes y recomendaciones elaboradas por las autoridades sanitarias.
• Y finalmente, en cualquier caso el seguimiento y rastreo del COVID-19 en las áreas de actividad donde hayan de montarse los espectáculos o eventos para garantizar que puedan realizarse de forma segura, y la urgencia sanitaria de ganar en la lucha contra el virus deben primar siempre frente a la urgencia económica de realizar la actividad. En ningún caso la actividad económica puede ser prioritaria frente a la salud, para lo que deben disponerse mecanismos de compensación económica mediante prestaciones o subsidios a las personas trabajadoras afectadas por la cancelación de bolos o festivales a causa de un rebrote.